A pesar de ser autóctonos, los frutos como el arazá, el guayabo, o la pitanga son poco conocidos y utilizados en la gastronomía local. Caen de los árboles y arbustos en parques y plazas de todo el país, pero nadie lo advierte. Esta receta y otras incluidas en el Recetario de frutos nativos del Uruguay intentan difundirlos, una tarea que impulsaron varios pequeños productores para diversificar la cocina nacional.
Ingredientes para seis porciones:
Preparación:
Se hace un jarabe con 500 gramos de azúcar, ½ litro de agua y hojas de cedrón. En otro recipiente se mezclan 50 gramos de azúcar, las yemas y la maicena hasta que se forme una pasta. Luego se le agrega leche caliente y se revuelve fuego lento de forma constante. Cuando logra una consistencia cremosa se saca del fuego y se reserva. En otro recipiente se bate la crema de leche con 50 gramos de azúcar hasta formar chantillí.
En otro bowl se mezclan 200 mililitros del almíbar, 200 gramos de pulpa de arazá y el liceo. Allí se empapan las vainillas y se colocan en una fuente poco profunda. Sobre las vainillas se verte luego la crema de yemas, y por último se desparrama el chantillí. se decora con arazá fresco bañados en el jarabe de cedrón. Se come frío.
Para algunas familias de Melo no siempre es fácil conseguir carne en la ciudad. Por eso se acercan algunos fines de semana al Río Negro para cazar y pescar. Las presas pueden ser carpinchos, mulitas o pintados que terminan en un asador a la orilla del río. Los niños acompañan a sus padres y esperan ansiosos junto al fuego para ver en su plato la carne que consiguieron.
Ingredientes:
Preparación:
Primero se prepara una mezcla con dos manzanas verdes ralladas, ½ litro de cerveza, pimienta negra molida y tomillo y comino a gusto. Por otra parte, se aplican cortes sobre la grasa del carpincho sin llegar a la carne. Luego se sala levemente la carne y se unta con la mezcla, reservando el resto. Se deja reposar en refrigerador un mínimo de 24 horas. Al día siguiente se extrae la carne del refrigerador 2 o 3 horas antes de llevarla a la parrilla, y se completa el salado. Se coloca la carne 10 minutos sobre brasa fuerte y se completa cocción a fuego más suave. De vez en cuando se moja con el preparado de la mezcla. La cocción es lenta y larga, debe quedar la carne bien cocida.
Sebastián Rodríguez es un riverense descendiente de indígenas que vive a flor de piel su tradición, y a pesar de no tener la educación formal completa, es un estudioso de la naturaleza y en particular de los árboles. Durante años estudió un árbol particular que crece frente a su casa en el campo norteño, hasta que descubrió que podía fabricar un dulce a base de su madera. Y el producto va lentamente camino a convertirse en una estrella del departamento: ya incluso lo ha vendido al exterior.
Ingredientes:
Preparación: se debe elegir un brote tierno del árbol carica quercifolia, cortarla y pelarle la corteza hasta llegar al núcleo más suave. Una vez logrado eso, se debe rallar la rama y dejarla en remojo durante una noche. Al otro día, la madera se habrá ablandado aún más, pero no habrá perdido el sabor amargo que la caracteriza cuando es recién cortada. Para continuar con la cocción, se mete la madera rallada en una cacerola y se la hierve. Allí se agrega el azúcar a gusto. “Nunca hice la medida exacta”, explica Rodríguez. De esa manera se le quita el amargor y el producto queda finalmente dulce. Se mantiene en la cacerola hasta que se queme levemente.
Con la FM 100.3 sonando y animados por las melodías de Los Fatales y Karina, tres uruguayas y tres armenios cocinan lehmeyún en el restaurante Gago. Es que el plato típico de Armenia de a poco fue integrándose al recetario criollo, hasta aparecer en las cartas de muchas pizzerías o restaurantes de comida rápida. Incluso se los vende en los supermercados, congelados y al por mayor.
Ingredientes:
Para la masa:
Para el relleno:
Preparación:
Colocar la harina en forma de corona sobre la mesa. Disolver la levadura en un vaso agua caliente y mezclarla con la harina. Luego, de a poco, agregar el agua tibia y la sal. Amasar y dejar reposar mientras se prepara el relleno. Picar todos los ingredientes del relleno en trozos muy pequeños y mezclar. Luego de preparado el relleno, tomar la masa y formar bollitos que pesen unos 500g. Estirarlos con un palo de amasar sobre harina y colocarles el relleno. Meter en el horno.